Nobuhiro Watsuki

—Estás tan atenazado por el remordimiento y el sentimiento de culpa de haber arrebatado tantas y tantas vidas que tiendes a menospreciar la tuya propia. Cierras los ojos ante el hecho de que tu vida es también una vida humana. Y esto provoca que retraigas tu verdadera fuerza, lo que en ocasiones libera el instinto sanguinario de hitokiri que mora en tu corazón. Para superarlo necesitas ver lo que hay entre la vida y la muerte. Es indispensable tener la voluntad de vivir.

»Defendiendo a tus seres queridos y a los débiles mientras te sacrificas a ti mismo con piedad de santo lo único que conseguirás será hacer que la tristeza arraigue en sus corazones, por lo que nunca conseguirán la felicidad propiamente dicha. Aplacando los peligros de ciertas épocas mientras das tu vida con la ferocidad de un demonio shura solo marcarás un único hito en medio de las siempre fluyentes eras. La voluntad de vivir es lo más poderoso que existe. Nunca lo olvides.

»Así, llegarás a dominar la Amakakeru Ryû no Hirameki a voluntad, y ni la brigada de Shishio ni el hitokiri en tu interior lograrán vencerte jamás.

—¿Maestro...?

—No te preocupes. Las consecuencias de la transmisión del Amakakeru Ryû no Hirameki forman parte del destino de los maestros del Mitsurugi y sus discípulos. Debes considerar que tu juramento de "no matar" solo se aplica en contextos ajenos...

—¡¡Maestro!!

Rurouni Kenshin, por Nobuhiro Watsuki